domingo, 1 de junio de 2008

Llamar a otro

"Dura más de una madrugada la primera noche de una mal amada bien follada."
Carmen Camacho


Llamar a otro, esa es la clave.
Ignorar posibilidades de reencuentro,
no cumplimentar la solicitud del número de teléfono,
descartar el proceso de idealización.
Volverse material
perseguir la materia,
centrarse en la carne.
Y llamar a otro.

Durante el periplo, 
ese que empieza en un bar 
y termina en la alcoba,
no hablar de una,
no contar dos.
Evitar en la medida,
más que nunca medida,
la enumeración tediosa.

Y apreciar los regalos:
la espiral de una caricia en el hombro,
el limón rechazado de José Cuervo,
la guitarra sin cejilla,
las cejas arqueadas y cómplices.

Saber que son efímeros.

Repetirse varias veces que son efímeros.
No utilizarlos en la receta del proceso de idealización.
No utilizarlos.
No utilizarlos.
En un papel, tampoco.
Llamar a otro.

4 comentarios:

Unknown dijo...

mmmmmmmm....

Anónimo dijo...

Ese teléfono!!! Nos come el alma. Yo, desde el domingo, tengo un teléfono más.
Danivé.

Anónimo dijo...

te he visto en canal sur mu guapa

detective mariscal dijo...

Grande, hermana de sangre, grande de verdad.